La Charanguita Taucher

Un nuevo encargo para construir una charanguita me hizo recorrer las fotografìas y planos desarrollados durante la creacion de la primera que construi para Francisco Matus, basado en una idea del Luthier Gamboa. La nueva version me fue encargada por la doctora Taucher para su nieto músico y debía cumplir con requerimientos similares a la primera, no obstante, esto es siempre algo restrictivo y por lo tanto opté por agregar algunas variaciones y refinamientos. Porque claro, cada instrumento es único y a medida que progresa van apareciendo sus propias características, su expresion particular.

Este modelo es mas liviano que el anterior, como principal diferencia menciono que el charango, que se construye en una sola pieza de madera desde la caja de resonancia hasta el clavijero, esta realizado en Acacia Melanoxylon ( Aromo australiano o extranjero ), del que ya he comentado sus excepcionales propiedades acusticas y estructurales, a diferencia del primero, que fue tallado en madera de fresno.

El brazo del charango tambien tiene incrustado un refuerzo en su interior, que en este caso es de acacio, madera muy dura y elástica y en su exterior se incrustó una barra de palo rosa hindú, que por su dureza contribuye a dar al conjunto mayor solidez que se expresa obteniendo tambien un mayor sustain.

Los elementos principales del instrumento, es decir la tapa armonica, el brazo de la guitarra, los costados y los fondos estan construídos de manera similar en ambas charanguitas, esto es: cedro rojo canadiense, raulí y aromo australiano, respectivamernte.

La variación introducida en el brazo de la guitarra fue la de haber reforzado interiormente este con barras de acacio en conjunto con dos barras cortas de fibra de carbono, en la zona en que todos los brazos de las guitarras de tipo clasico tienden a curvarse con el paso del tiempo, entre el V y el XII traste. Siendo el raulí una madera relativamente blanda y liviana, esta incrustación adicionaría rigidez sin aportar demasiada masa al sistema. Hay discusiones al respecto, pero a mi me parece preferible un brazo ligero, que no obstruya el paso de los armonicos en ambos sentidos, pero a la vez rígido, permitiendo liberar su energía justo donde se espera: el puente. En este tipo de guitarras de cuerdas de nylon, cuya baja masa ( a diferencia de las cuerdas de metal) no aporta mucha energía de reposicion a la resonancia de una nota, sino mas bien produce un sustain relativamente corto y es preferible reducir masa en el instrumento lo mas posible.

Existe bastante informacion sobre la guitarra clásica española moderna, la que adquirió su forma definitiva con el maestro Antonio de Torres en el siglo XIX y es la misma que conocemos actualmente, sin haber sufrido modificaciones sustanciales. Ya es convención la forma y las medidas, la escala de 650 milimetros, el uso de las vigas en abanico de siete piezas en la tapa armónica y en general, todas las características se han mantenido inalteradas. La charanguita debe su diseño a la cruza de dos instrumentos conocidos, basandose en la guitarra clásica en casi todas sus dimensiones. Pero dos grandes diferencias que se apartan del diseño original hacen que este sea un instrumento completamente nuevo y por lo tanto su sonido difiere un poco al de una guitara clásica. La primera diferencia, obligada por tener que acomodar dos brazos a partir de la forma regular de la guitarra, es el mayor ancho de la curva inferior de la tapa armónica. Este efecto tiene como resultado un sonido mas grave en las cuerdas bajas. Para evitar que esto llegue a ser excesivo y pueda generar tonos un tanto "boomy" o ambombados, lo que se hace es reducir el ancho de la caja, aminorando el volumen de aire dentro de ella. Por esta razón la charanguita, aunque mas ancha, es de apariencia más esbelta que una guitarra clásica.

La segunda diferencia derivada de la misma causa, es el desplazamiento el puente hacia el lado de las cuerdas altas, siguiendo el curso del brazo que ya ha sido desplazado para acomodar el cuerpo del charango en el otro extremo. Lo que sucede es que esto acentúa aún mas el efecto mencionado antes, dejando una gran área de la tapa libre y generando tonos graves. Simultáneamente la vibración generada por las cuerdas agudas Mi, Sol, Si quedan un poco restringidas en su rango dinámico y como consecuencia se percibe una menor sensibilidad de respuesta al tacto, especialmente en la cuerda Mi, aunque para la mayoría de los músicos puede ser casi imperceptible este efecto. En cuanto al volumen este no se altera notablemente.

En ambos instrumentos, tanto en el Matus como en el Taucher, ocurren de manera idéntica estos leves cambios que, aunque se apartan un poco del sonido de la guitarra clásica, es importante tenerlos en consideracion, puesto que es el precio que se debe pagar por tener dos instrumentos listos y a la mano siempre. La charanguita es "otro" instrumento, dispuesto a brindarle a su ejecutante nuevas posibilidades expresivas y creativas, que posee su propia voz, llena, profunda y a la vez cálida.

En cuanto al charango, conserva todas sus dimensiones inalteradas con respecto del instrumento original, a excepción del espesor de la caja ya que ha sido necesario acomodarlo dentro de la caja de la guitarra, compromiso que resta cerca de 1 centímetro a la profundidad de este último. Existen muchas variedades de charango por lo que no hay convención acerca de las medidas únicas de este, hay tantas variaciones como comunidades altiplánicas. Pero en este caso se ha utilizado las características de un charango boliviano de Achá. El resultado es óptimo y no sufre detrimento en cuanto a volumen y tono. Su tono es brillante y claro y a diferencia de los charangos tradicionales bolivianos construídos con abeto, este es más más cálido y redondo debido a que comparte la tapa de cedro rojo con la guitarra. El cedro otorga un carácter suave y cálido con mayores tonos graves.

Algunos toques que diferencian ambas charanguitas y que sea relevante destacar : una aplicación de palorrosa hindú en forma de ala sobre el costado del charango, le entrega un carácter radical y propio. El puente del Taucher conserva la forma rectangular de la guitarra clásica e incrustaciones en nácar de nitrocelulosa a diferencia del Matus que tiene sus bordes curvos e incrustaciones de hueso natural. Una incrustación en espina de pescado en la línea media de la espalda contrasta con la hermosa veta de la madera color miel con gruesas franjas oscuras. Finalmente, para los filetes de los bordes se usó una madera brasilera de color violeta, llamada "Morado", la que confiere un mayor acento individual a este lindo y singular instrumento.

He querido tener una mirada crítica y comparativa sobre este instrumento que sin duda produce una gran atracción por su apariencia, pero tambien por combinar dos instrumentos tan asimilados por nuestra cultura latinoamericana.

En general se han optimizado factores constructivos, acústicos y de diseño general con el fin de lograr una combinación armónica de ellos y a mi juicio, hemos conseguido algo totalmente nuevo en el barrio de los músicos andinos o de fusión y que, por cierto no es para neófitos, sino mas bien para músicos soñadores y exigentes, que de seguro se encontraran al tocarlo con muchas canciones nuevas.

Charly Schorr y su modelo " Eclipse "

Del taller a la acción

Esteban Maldonado Gervassi, Ingeniero de Estudio La Cantina de Maitenhuapi

Es lo que verdaderamente importa cuando uno se esmera seis meses en terminar un instrumento : ... que llegue a sonar bien en el ambiente para el que nació, los escenarios o el estudio. Es en este instante cuando se puede apreciar la calidad sonora de una guitarra, al ser tocada junto con otros instrumentos, su volumen, timbre, carácter, balance, rango dinámico, en fin, su "tocabilidad". Es el momento cuando los músicos alabaran las destrezas del luthier al conseguir tocarles la fibra, o definitivamente no. Se dice que todo instrumento nuevo viene " con canciones" nuevas y este mito acuñado por los músicos tiene mucho de verdad. Sucede que es imposible que dos guitarras suenen igual aunque hayan sido hechas de la misma madera, por las mismas manos y en forma simultánea. Esto tiene que ver con las infinitas caracteristicas físicas de los materiales con que está construido, mas allá de las dimensiones exactas o del acucioso seguimiento de las instrucciones de un plano de alguna guitarra célebre. Sin embargo no todo es un territorio de penumbras, existen métodos que aunque parezcan inexactos no son menos efectivos y nos permiten homologar varias piezas de madera a traves de sus propiedades acústicas y ya no solo dimensionales consiguiendo así una cierta homogeneidad a la hora de construir series de instrumentos, de manera que esta factura sea consistente en el tiempo.

Pero, dónde están los libros que enseñan esta ciencia? Desgraciadamente, o afortunadamente para algunos, no los hay. Es que este oficio se forjó a golpes de ensayo y error. Hubo constructores en la antiguedad que gracias a un oído absoluto conseguían grabar en su mente los "tonos correctos" al percutir con un martillo de piano o con la yema de los dedos sobre la tapa de un violín o de una guitarra, haciendo gradualmente sutiles modificaciones a su estructura hasta el punto en que diera el sonido " correcto ".

Todo es vibración, hasta la materia misma lo es, partículas subatómicas vibrando en medio de la nada a frecuencias altísimas y generando todo lo que "existe". Cuando las vibraciones de distintas frecuencias se ensamblan unas a otras dentro de una misma octava, se dice que son notas armónicas, siempre que la distancia entre los intervalos sea impar. Y nacen los acordes mayores : notas 1-3-5, menores 1-3b-5, séptimas: 1-3-5-7.....y la ciencia de la armonía lo explica de manera exacta.

Hemos juntado materia + vibración, he aquí el gran misterio de la construcción de un instrumento de cuerdas: conseguir que sus partes vibren como un todo, lo que se denomina un sistema acoplado cuyas piezas no oponen resistencia unas con otras, sino al revés, se potencian para lograr el sonido mas puro y nítido que sea posible, esto es, sin interferencias o vibraciones no deseadas. Acaso hay algo mas gratificante que ver a los amigos disfrutando al hacer música con una guitarra creada por las propias manos...de uno ?

Siempre las nuevas guitarras vienen cargadas de nuevas canciones, los compositores las encuentran entre los timbres que fluyen de sus notas y es por esta razón que nunca se detiene esta obsesión por adquirir otra guitarrita que vaya acrecentando la modesta colección personal. En la trinchera del luthier se construye el concepto, los amigos darán el implacable y a veces musical veredicto.